domingo, 15 de abril de 2012

La clonación (ejercicio 5, tema 5)

Clonar es el proceso que consiste en obtener individuos idénticos a otros, es decir, con el mismo material genético, de modo que poseen exactamente las mismas características. Un ejemplo que se produce de forma natural son los gemelos; éstos proceden de un único embrión, que durante sus primeras fases se separa en dos y da lugar a dos individuos diferentes, pero ambos idénticos, con el mismo ADN.

File:Dollyscotland.JPG
Restos disecados de Dolly, primer animal clonado, a partir de una célula adulta. 

La clonación artificial es más complicada. Se trata de obtener un nuevo individuo a partir de uno ya adulto. Todas las células de un ser vivo poseen la misma información genética, que es la de todo el individuo. Es decir, aunque sea una célula epitelial, poseerá también los genes que marcan el color de los ojos, el sexo de la persona, su altura...Todo está en todas las células. Esto resulta una gran ventaja, pues, teóricamente, extrayendo una célula cualquiera, podríamos construir un nuevo cuerpo a través de la información que posee.Esto es así porque provienen de una única célula inicial, el cigoto, que ha sufrido sucesivas divisiones o mitosis.



Sin embargo, las células adultas están diferenciadas, y han perdido la capacidad de reproducirse para generar nuevos individuos. De  modo que, aunque poseamos la información, no tenemos las herramientas para producir un nuevo ser.





Esto se consigue extrayendo un óvulo, llamado óvulo de alquiler, del que extraemos el núcleo que posee y le insertamos el de la célula que deseamos clonar. El óvulo no ha perdido aún la capacidad de generar nuevos seres. Este óvulo se cultiva en el laboratorio, para que, como si hubiera sido fecundado, produzca células embrionarias con capacidad de diferenciación en cualquier tipo de tejido. Si quisiéramos tan solo obtener tejidos o células clonadas, por ejemplo para utilizarlas terapeuticamente, el proceso se detendría aquí. Las células clonadas, con capacidad de diferenciación, se "insertarían" en el individuo del que proceden, en el tejido que deseamos. Así, si un órgano o tejido está enfermo, las células nuevas y sanas podrían sustituir a las viejas, y conseguir la curación; todo ello es posible porque las células clonadas tienen la misma información genética que las que posee el paciente.

Si lo que queremos es clonar un individuo completo, debemos introducir el óvulo en un "útero de alquiler". La madre portará el nuevo cigoto hasta que nazca y el nuevo ser será idéntico a aquel del que provienen las células.


Ejemplo de clonación en ovejas. La oveja clonada (10) posee las mismas características que la inicial (1)

Los posibles usos de la clonación son múltiples. Uno de los más importantes es la clonación de animales transgénicos; su modificación genética resulta complicada y no da lugar a muchos individuos. Además, mediante la reproducción sexual, al producirse diversidad y recombinación de los genes, se podían perder aquellos genes introducidos. En cambio, clonando aquellos organismos que han sido modificados se podría obtener mayor cantidad de ellos, y con las características que nos interesan.
Otro de los grandes retos es la clonación terapeutica. Consiste en, como he explicado anteriormente, realizar la clonación de células y tejidos, que se podrían implantar después en los órganos enfermos de una persona para reemplazar aquellas células dañadas y conseguir la curación.



Aquí, en cambio, entran en juego los conflictos éticos que supone. Para realizar la clonación de tejidos y células habría que "crear" un embrión, a partir de un óvulo de alquiler con el material genético de la persona en cuestión. Posteriormente, cuando se hayan obtenido las células que se persiguen y que tienen capacidad para diferenciarse en el tejido que nos interesa, habría que destruirlo. Hay quién afirma que no es moral crear "un ser humano", o un embrión de un ser humano, para luego destruirlo. El argumento es "que el ser humano es un fin en sí mismo, y no puede ser utilizado como un medio".

Opinión personal sobre la clonación terapeutica. 
Creo que no podemos pensar en el conjunto de células embrionarias clonadas como una "posible vida o posible ser humano", como afirman los detractores de este tipo de clonación. Es cierto que, si lo desarrolláramos en un ambiente adecuado, lo implantáramos en un útero, y realizáramos todo el proceso completo el resultado sería un ser humano clonado, al igual que se clonan animales con fines reproductivos. Pero esto es un argumento que no tiene fuerza por sí mismo. El hecho de que pueda convertirse en una persona no lo hace que sea una persona en sí. Si extrajéramos un óvulo para fines científicos, y no lo fecundáramos, ¿estaríamos perdiendo así mismo una vida? ¿Si desechamos una célula cualquiera del cuerpo, es una posible vida perdida, porque posee cierto material genético? En mi opinión, no. Tan solo se trata de desarrollar unas células que tienen una capacidad especial, tanto por ser capaz de diferenciarse como por poseer la misma información genética que el individuo. Con el desarrollo de estas células, se conseguirá su curación. Este es el proceso, simplemente. Cada día se destruyen personas en guerras, hambrunas, represiones y pobreza, y eso es un hecho; pero no podemos decir que se destruyan personas por trabajar con células embrionarias.


Recordar que esto tan solo es una opinión personal. Aún así, sea cual sea la posición que se adopte ante esto, es cierto que la clonación da mucho que pensar, tanto por sus usos actuales como las posibilidades que abre.




1 comentario:

  1. Muy bien. Lo mejor: tus opiniones y frases personalizadas, además del comentario sobre una noticia de actualidad

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